Y … pues nada… viernes… día madre- hija y yo aquí sin hija.
Extrañando esos
pasos que llegan a toda prisa.
Añorando esa voz
que grita: “¡Mamá, ya llegué! ¿No se te olvido que es día madre-hija?
¿Qué vamos a
hacer hoy?”
Escuchar sus
planes interminables, a corto y largo plazo.
Todo lo que hará
cuando sea grande.
Lo bien que la
pasamos juntas.
Mi niña se fue de
campamento y la echo de menos.
Son solo unos
días pero no puedo evitar extrañarla.
Pienso en las
madres sin hijos, esas que no pierden la esperanza
Las que continúan
en la búsqueda de los desaparecidos.
Que dolor tan
terrible para ellas, tantos días, meses, años
Y siguen buscándolos.